lunes, 30 de julio de 2007

Reflexiones


Para Enrique Rojas, educar significa: " ayudar a alguien para que se desarrolle de la mejor manera posible en los diversos aspectos que tiene la naturaleza humana". "Educar significa comunicar conocimientos (información) y promover actitudes (formación)".

"Educar es instruir, formar, pulir y limar a una persona para que se vuelva más armónica y sea capaz de gobernarse a sí misma. (...) educar es hacer que alguien aprenda a vivir con alegría".

Desde esta concepción cabe preguntarnos cuál es nuestra función como parte del proceso educativo. En qué medida estamos ejerciendo una efectiva mediación pedagógica que acompañe y promueva el aprendizaje.

Para contestarnos esta pregunta se hace imprescindible una " reflexión axiológica” entre los mediadores pedagógicos para pensar, analizar, meditar sobre los valores humanos y académicos en los que podría cimentarse la educación universitaria.

Desaprender aquellos valores que no han favorecido la práctica de acompañar y promover el aprendizaje, es comenzar a reconocer las causas que generaron este estado de situación actual y sobre el cual queremos incidir para alcanzar un nuevo estado de situación que se compadezca con el concepto de Educación que hemos enunciado.

De allí que educar nos exige conocernos a nosotros mismos y amar a nuestros semejantes. En la proporción en que logremos esos objetivos, en esa misma proporción, podremos educar.

El educador debería proponerse SER, más que poseer o hacer; porque en el SER una persona con objetivos, propósitos y voluntad para vivir, radica la posibilidad de hacer un uso solidario de lo que se tiene.

Entonces, el educador podrá ser el instrumento eficaz que promueva y acompañe el aprendizaje, porque quien intenta conocerse a sí mismo, conoce a los demás, los entiende, motiva y acompaña en el proceso de su propio conocimiento personal.

No cabe dudas de que todo lo que aprendemos sobre la mediación pedagógica, una educación alternativa, las instancias del aprendizaje, el tratamiento del contenido, las prácticas de aprendizaje, la productividad pedagógica, la evaluación y validación y otros temas similares, deberán estar inspirados por la intención de “ser lo mejor de lo que seas” y entregarlos a quienes elegimos como destinatarios de lo que hacemos y tenemos.

Para mí, mediación pedagógica es amar lo que se hace y a aquéllos que son los destinatarios de lo que se hace. De lo contrario, las técnicas pedagógicas, la didáctica, no alcanzan para que el educando crezca y aprenda a caminar sobre sus propios pies.

La pedagogía es la ciencia que se ocupa de la educación y la enseñanza; la didáctica es el arte de enseñar y la mediación pedagógica es el arte de amar al educando, la pedagogía y la didáctica.

Sin esa entrega de amor no habrá educación del espíritu ni mediación pedagógica.


Estos conceptos constituyen una expresión de deseos, un conjunto de objetivos humanos que están altamente condicionados por el “arte de lo posible”.

El arte de lo posible requiere que tengamos “la cabeza en el cielo y los pies en la tierra”, con lo que un aspecto esencial a sincerar es el intentar hacer un diagnóstico sobre las condiciones fácticas que tienen alumno, profesores, no docentes y demás auxiliares para desarrollar alguna de las actitudes anunciadas, obviamente en el caso de coincidir con ellas.

En el intento de acercarnos a un diagnóstico, es saludable preguntarnos sobre cuál es el tiempo y condiciones disponible que tenemos los profesores para el estudio, investigación, preparación de clases, elaboración de materiales didácticos y otras actividades vinculadas.

¿Existe alguna forma de medir la vocación docente?

¿Cuáles son las condiciones laborales integrales que tienen los profesores?

¿Cuáles son los objetivos y posibilidades que tienen los alumnos de hacer fructífera su actuación académica?

Considero que si desconocemos las condiciones de vida que tienen todos los actores del proceso educativo, es poco probable que podamos pensar y realizar proyectos que nos acerquen a los objetivos propuestos para esta reunión[1].

Enrique Rojas expresa: “se educa más por lo que se es, que por lo que se dice. Las palabras mueve, pero el ejemplo arrastra… El poder del educador depende menos de sus palabras que de su presencia silenciosa y auténtica”

“El aprendizaje del educador, al enseñar, no se da necesariamente a través de la rectificación de los errores que comete el aprendiz. El aprendizaje del educador al educar se verifica en la medida en que el educador humilde y abierto se encuentre permanentemente disponible para repensar lo pensado, revisar sus posiciones; en que busca involucrarse con la curiosidad del alumno y los diferentes caminos y senderos que ella lo hace recorrer.

Algunos de esos caminos y algunos de esos senderos que a veces recorre la curiosidad casi virgen de los alumnos están cargados de sugerencias, de preguntas que el educador nunca había percibido antes. Pero ahora, al enseñar, no como un burócrata de la mente sino reconstruyendo los caminos de su curiosidad –razón por la que su cuerpo consciente, sensible, emocionado, se abre a las adivinaciones de los alumnos, a su ingenuidad y a su criticidad- el educador que actúe así tiene un momento rico de su aprender en el acto de enseñar. El educador aprende primero a enseñar, pero también aprende a enseñar al enseñar algo que es reaprendido por estar siendo enseñado” (Freire Paulo. “Cartas a quien pretende enseñar”. Siglo XXI Editores. 1993)

En una época de nuestra historia en donde una de las formas de diálogo es la represión y la violencia, nosotros rescatamos a Humberto Maturana cuando dice que “no es la agresión la emoción fundamental que define lo humano, sino el amor, la coexistencia en la aceptación del otro como un legítimo otro en la convivencia. No es la lucha el modo fundamental de relación humana, sino la colaboración”.



Marcelo Fernandez (profesor de Administración Tributaria en la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Cuyo.






[1] Este documento fue presentado en una reunión de docentes de la Facultad de Ciencias Económicas de la U.N. de Cuyo.









jueves, 26 de julio de 2007

Propuesta de alternativas en relación a la práctica profesional


Existe en nuestra sociedad una amplia gama de necesidades…innegable/s.


Existe en nuestra sociedad una gran cantidad de instituciones que ponen de manifiesto estas necesidades de forma organizada. Queremos decir que, existen organizaciones que día a día tratan de manifestar aquellas inquietudes de la sociedad que necesita crecer alimentándose, educándose y capacitándose.


Es en este punto en donde es útil preguntarnos hasta qué punto nuestra práctica en relación a la comunicación social tiene que ver con lo que la sociedad necesita o aquello que nos es ‘socialmente redituable’. La respuesta en este sentido queda en posesión del lector y, nuestra respuesta nos anda obligando a tener en cuenta cuál es el perfil de comunicador social que nuestra sociedad precisa. Nos focalizaremos en uno sólo para evitar que nuestro amplio campo de estudio nos impida realizar la proposición: “un comunicador social que ‘regrese’ al barrio, que ‘retorne’ a las instituciones que forman parte del barrio y de lo que algunos han llamado el ‘Estado chico’. De esta manera, nos formamos como comunicadores sociales que se insertan en los comedores comunitarios, las bibliotecas populares, las uniones vecinales, radios comunitarias, centros de salud y todo tipo de institución que, por su quehacer cotidiano, es el sentir y el reflejo de las necesidades del vecino” (han notado cuantas veces aparece la palabra necesidades… ¿por qué será esto posible?; ¿podemos hacernos de una conciencia social de otro modo?)


Nuestro inconveniente es el siguiente: existe para la carrera de Comunicación Social un ‘reglamento de práctica profesional’ que determina cuáles son los requisitos de un ‘alumno’ para realizar dicha práctica; obligaciones y derechos de los alumnos; obligaciones y derechos de las partes institucionales intervinientes, etc. Al llegar al apartado V nos encontramos con que…


V - De la evaluación de los alumnos practicantes.-

ARTICULO 13º .- La evaluación de los alumnos se llevará a cabo mediante el informe de su desempeño que, a tal efecto, presente el medio o institución donde se haya efectivizado la Práctica, con la Ficha de Evaluación prevista en el Art. 15; asimismo cada estudiante deberá presentar su informe de Práctica. Para dar cumplimiento a lo previamente señalado deberán confeccionarse dos tipos de Ficha: una para ser completada por el medio o institución y otra para la confección del Informe de Práctica.


Cuando en el artículo 13º se hablan de ‘medio o institución’ en realidad lo que se exige es que en ese medio o institución trabaje, de manera formal, un comunicador social. Sólo se puede hacer la práctica profesional en instituciones que tengan en su equipo de trabajo un ‘profesional de la comunicación’ que evalúe al estudiante. Quien haya seguido el hilo de este intento de proposición podrá preguntarse: ¿acaso aquellas instituciones que nombramos al principio de este intento de cambio (quiero decir, comedores comunitarios, ONG’s, uniones vecinales, etc.) se encuentran en condiciones de contratar a un comunicador social?, ¿no existe una forma de ‘elitización de la práctica’ en este artículo 13?, ¿cómo podemos hacer aquellos que tenemos la intención de cumplir con lo formal de la práctica y, a su vez, queremos comprometernos en el trabajo con las mencionadas formas de organización?


Por este motivo es que estamos tratando de construir un “proyecto de alternativas en relación a la práctica profesional”. En este sentido, se proponen métodos alternativos de evaluación que le permitan al estudiante de comunicación social poder realizar sus prácticas en instituciones que no tienen la posibilidad de contar con un comunicador social entre sus filas:

Ø Proyecto de trabajo: el estudiante tiene la posibilidad de presentar un proyecto de comunicación. Dos formas:

Si el estudiante ya conoce la institución en donde se va a desarrollar, puede presentar el proyecto al comenzar su práctica profesional. (*)

Si el estudiante no tiene pleno conocimiento de esta institución (queremos decir, no tiene una idea acabada de las necesidades en materia de comunicación que posee la institución) podrá presentar el proyecto al mes de comenzada la práctica. (*)


Ø Evaluación docente: un docente de la F.C.P. y S. de la U.N.C. supervisará, cada 15 días, el trabajo que el alumno está desarrollando en la institución.


Ø Productos de comunicación: nuestra disciplina da la posibilidad de generar productos que luego pueden ser evaluados. Estos productos pueden ser: revistas barriales, programas de radio, trabajos de comunicación institucional, trabajo en talleres de: comprensión de textos, alfabetización, etc.


(*) Esto puede funcionar de la misma forma en que se trabaja una tesina, con un ‘director de práctica profesional’.


Nuestro plan de estudios en algunas líneas de su fundamento nos invita a continuar con esta reflexión:

“Dentro del amplio espectro de estudios posibles vinculados a la comunicación, la Carrera se inscribe en el espacio de lo que se entiende como "comunicación social", con énfasis en el campo de los denominados medios masivos de comunicación. Este obligado recorte del objeto de estudio de ninguna manera significa prescindir del conocimiento y análisis de las articulaciones que se establecen con otras zonas de las teorías y prácticas de comunicación no incluidas en lo masivo. Más aún, el conocimiento y reflexión sobre esas otras prácticas resultan imprescindibles para la adecuada comprensión de los problemas enfatizados por la Carrera. De la misma manera, el conocimiento de disciplinas del campo de las ciencias sociales que buscan explicar la constitución y el funcionamiento de la sociedad moderna se vuelve condición primordial para la comprensión de la temática precisada por la Carrera.


Esto es simplemente un boceto para comenzar a trabajar sobre la ‘alternativas de las prácticas’.


Por este motivo te invitamos a que envíes tus ideas y todas aquellas mejoras que debemos ir haciendo a nuestro plan de estudios y nuestros diferentes enfoques de lo social para que, errores al margen, no cometamos la imprudencia de creernos ‘dentro de lo social’ cuando muchas veces lo que habitamos es ‘el parque general San Martín de lo social’.



Un abrazo fraternal... y deja tus comentarios noma!








miércoles, 18 de julio de 2007

Mesas de Exámenes - Agosto 2007

Vencimientos de Inscripción - Agosto 2007
PARA RENDIR VENCE EL DIA

30 DE JULIO - - - - - - - - - - - - 23 DE JULIO

31 DE JULIO - - - - - - - - - - - - 24 DE JULIO

25 DE JULIO FERIADO

01 DE AGOSTO - - - - - - - - - - - 26 DE JULIO

02 DE AGOSTO - - - - - - - - - - - 27 DE JULIO

03 DE AGOSTO - - - -- - - - - - - 30 DE JULIO

Mesas de Exámenes - Agosto 2007

CARRERA: CIENCIA POLÍTICA Y ADMINISTRACIÓN PÚBLICA -PLAN 96/99 Y ADMINSITRACIÓN PÚBLICA Y CIENCIAS POLÍTICAS – Plan 85

LUNES 30 DE JULIO

DOCTRINAS E IDEAS POLITICAS I – P.96 17.00

ADMINISTRACION GENERAL-P. 96 – 16.30

ORGANIZACION Y GESTION DEL ESTADO- P.96- 16.30

EPISTEMOLOGIA DE LAS CS. SOCIALES P. 85/ 96 – 8.30

ANALISIS CUANTITATIVO – 8.30

ANALISIS ADMINISTRATIVO - 15.30

SOCIOLOGIA GENERAL- 8.30


MARTES 31 DE JULIO

ADMINISTRACION AMBIENTAL- P.96- 8.30

DOCTRINAS E IDEAS POLITICAS II P. 96- 17.00

TEORIA POLITICA I – P. 96 – 8.30

ESTADO SOCIEDAD Y POLITICA- P. 96- 8.30

FRANCES P.85/96 – 8.30


MIERCOLES 01 DE AGOSTO

RELACIONES INTERNACIONALES - P.96 – 8.30

INSTITUCIONES DEL DERECHO- P. 85/ 96 – 9.00

ADMINISTRACION FINANCIERA- P. 96 – 8.30

ADMINISTRACION DEL RECURSO HUMANO –P.96- 16.30


JUEVES 02 DE AGOSTO

IDEAS POLITICAS Y SOCIALES AMERICANAS- P.85/96- 8.30

DERECHO CONSTITUCIONAL- P.85/96- 16.30

METODOLOGIA P/LA INV. EN CIENCIA POLITICA- P.96- 8.30

HISTORIA INSTITUCIONAL ARGENTINA- P .96- 9.30

SISTEMAS DE CONTROL DE GESTION P. 96 – 17.00

INGLES- P.85/96- 16.30

OPT. DESCENTRALIZACION, DESARROLLO LOCAL Y GOB.MUNIC. – 8.30


VIERNES 03 DE AGOSTO

TEORIA ECONOMICA I Y II- P.96- 15.30

DERECHO ADMINISTRATIVO- P.85/ 96 – 8.30

TEORIA POLITICA II – P. 96- 8.30

POLITICA ECONOMICA – P. 96 – 8.30

PROGRAMACION Y ADMINISTRACION DEL DESARROLLO- P.85- 8.30

CARRERA: SOCIOLOGIA PLAN 91 Y 99



LUNES 30 DE JULIO

PROCESOS SOCIALES CONTEMPORANEOS- 8.30

EPISTEMOLOGIA DE LAS CIENCIAS SOCIALES – 8.30

HISTORIA ARGENTINA I – 16.00

ESTRUCTURA SOCIAL - 16.00


MARTES 31 DE JULIO

BASES MATEMATICAS P/LA INVESTIGACION SOCIAL- 8.30

PROBLEMATICA FILOSOFICA – 8.30

FRANCES – 8.30

TECNICAS ESTADISTICAS P/ LA INV. SOCIAL - 8.30


MIÉRCOLES 01 DE AGOSTO

INFORMATICA SOCIAL – 8.30

PSICOLOGIA SOCIAL – 15.30

METODOLOGIA DE LAS CS. SOCIALES – 15.30

SOCIOLOGIA DEL CONOCIMIENTO – 16.30

FORMACION DEL PENSAMIENTO SOCIOLOGICO – 8.30

SOCIOLOGIA SISTEMATICA – 16.30

ANTROPOLOGÍA SOCIAL Y CULTURAL – 8.30


JUEVES 02 DE AGOSTO

TECNICAS DE INVESTIGACION SOCIAL – 8.30

TECNICAS CUALITATIVAS P/LA INV.SOCIAL – 8.30

PLANIFICACION Y EVALUACION DE PROY. SOCIAL – 16.30

TEORIA SOCIOLOGICA II – 8.30

TEORIA SOCIOLOGICA CONTEMPORANEA – 8.30

SOCIOLOGIA LATINOAMERICANA – 8.30

SOCIOLOGIA DE LA COMUNICACION – 16.30

HISTORIA SOCIAL ARGENTINA II – 8.30

INGLES – 16.30


VIERNES 03 DE AGOSTO

ECONOMIA POLITICA - 8.30

SOCIOLOGIA POLITICA – 8.30

TEORIA SOCIOLOGICA CLASICA - P.99– 15.30

OPT. SOCIOLOGIA ARTE Y CULTURA – 16.00

CARRERA: TRABAJO SOCIAL – PLAN- 93/98- 99


LUNES 30 DE JULIO

PROBLEMATICA DEL TRABAJO Y DE LA SEG. SOCIAL- 16.00

FILOSOFIA SOCIAL Y POLITICA – 8.30

PROBLEMATICA EDUCATIVA – 8.30

PROBLEMATICA REGIONAL: REC. Y AMB. HUMANO- 15.30

ESTADISTICA Y DEMOGRAFIA – 8.30

EPISTEMOLOGIA DE LA CIENCIAS SOCIALES – 8.30

PROBLEMATICA DE LA SALUD –16.30


MARTES 31 DE JULIO

TRABAJO SOCIAL III: NIVELES DE ABORDAJE II Y TALLER III- 16.30

PSICOLOGIA GENERAL – 8.30

COMUNICACION SOCIAL – 16.30

TRABAJO SOCIAL I: FUND. DEL TRABAJO SOCIAL –8.30

TRABAJO SOCIAL IV: NIVEL DE ABORDAJE II Y TALLER IV – 16.30

TRABAJO SOCIAL II: METODOL. DEL TRAB. SOC. Y TALLER II – 16.30

FRANCES – 8.30

PSICOLOGIA EVOLUTIVA – 8.30

PLANIFICACION SOCIAL – 16.30

TEORIA POLITICA – 8.30

POLITICA SOCIAL - 9.15


MIÉRCOLES 01 DE AGOSTO

PROBLEMATICA DE LA FLIA.,MINORIDAD Y ANCIANIDAD- 16.30

PSICOLOGIA SOCIAL – 15.30

SOCIOLOGIA RURAL Y URBANA- 17.00

TRABAJO SOCIAL V: PRACTICA PROF. Y SUP. DOCENTE – 16.30

SOCIOLOGIA GENERAL - 16.00

ANTROPOLOGIA SOCIAL Y CULTURAL – 8.30


JUEVES 02 DE AGOSTO

INGLES – 16.30

HISTORIA ARGENTINA - 8.30

PROBLEMATICA DEL DELITO, PREV. Y REHABILITACION- 16.00

PROBLEMATICA DEL CONTROL SOCIAL Y VIOLENCIA – 16.00

METODOLOGIA Y TECNICAS DE INVES. CUANTI. Y CUALITATIVAS – 8.30

ECONOMIA ARGENTINA - 8.30

PROBLEMATICA DE LA VIVIENDA- 8.30


VIERNES 03 DE AGOSTO

ORGANIZACION Y ADMINISTRACION DE PROG.DE B. SOCIAL – 8.30

GESTION SOCIAL – 8.30

ETICA SOCIAL Y PROFESIONAL – 8.30

CARRERA:COMUNICACIÓN SOCIAL-PLAN 95/99


LUNES 30 DE JULIO

LINGÜISTICA – 8.30

EPISTEMOLOGIA DE LAS CS. SOCIALES – 8.30

HISTORIA ARGENTINA – 16.00

TEORIA DE LA IMAGEN – 8.30

TEORIA DE LA COMUNICACION SOCIAL I – 8.30


MARTES 31 DE JULIO

METODOLOGIA P/LA INV. SOCIAL – 8.30

INTRODUCCION A LOS PROB. DE LA COMUNICACION- 16.00

BASES SOCIOLOGICAS – 8.30

FOTOGRAFIA – 16.30

FRANCES – 8.30

PSICOLOGIA SOCIAL – 8.30

BASES PSICOLOGICAS P/LA COM. SOCIAL – 8.30


MIERCOLES 01 DE AGOSTO

SEMINARIO DE INFORMATICA Y SOCIEDAD – 16.30

COMUNICACION CINEMATOGRAFICA – 8.30

SEMIOTICA - SEMIOLOGIA - 16.00

ANALISIS DEL TEXTO – 16.00

SEMINARIO DEL ANALISIS DEL DISCURSO – 16.00

TEORIA LITERARIA Y LITERATURA HISPANOAMERICANA - 8.30


JUEVES 02 DE AGOSTO

INGLES- 16.30

IDEAS POLITICAS Y SOCIALES AMERICANAS – 8.30

TEORIA DE LA COMUNICACIÓN SOCIAL II – 16.30

PROPAGANDA Y PUBLICIDAD – 8.30

MARKETING, PUB. Y PROPAGANDA- 8.30

POLITICA COMUNICACIONAL ARGENTINA – 16.30

TEORIA DEL ESTADO Y POLITICAS DE COMUNICACION – 16.30


VIERNES 03 DE AGOSTO

ANTROPOLOGIA SOCIAL Y CULTURAL – 8.30

SEMINARIO SOBRE CULTURA MEDIATICA- 16.30

PROYECTOS DE COMUNICACION - 8.30



Tomado de Movimiento Sur.





domingo, 15 de julio de 2007

Sobre la pedagogía de lo justo y lo necesario


Que acá tienen lo justo y allá lo necesario. Pero justo y necesario no siempre se juntan… muchas veces, lo justo tiende al cielo y lo necesario al olvido y nosotros que los buscamos, pero no se encuentran. Se ocupan en algo que desconocemos y entonces nos dejan paveando.

Y nosotros buscamos y buscamos porque necesitamos de lo justo y lo necesario para que se haga uno y nos ayude a vivir. Lo justo nos hace entender el devenir de las cosas, nos lleva a que seamos nuestros jueces (lugar más alto al que el hombre puede aspirar) y comprendamos el ir y venir de nuestra vida. Nos pone frente a la piedra y a pesar de ella. Lo necesario nos da la base, nos fortalece, nos obliga a ponernos importantes a la hora de nuestra satisfacción.

Aquí y allá, lo justo y lo necesario un día se unieron y armaron una reunión. En esa reunión la historia apareció vestida de blanco y se sentó en un banco de los de adelante, el arte vino acompañado de la belleza y la sutileza… los tres se fueron al fondo para poder charlar por lo bajo; el vino apareció tarde pero libre y decidió sentarse detrás de la historia. Para lo justo y lo necesario los estudiantes estaban al frente y en su voz surgió lo nuevo similar: “abrirse al cambio, abrirse al universo, inventar lo nuevo que sobre lo cierto hace el amor, entendamos el devenir de las cosas y seamos nuestros jueces (de esta manera comprendamos el ir y venir de nuestras vidas); consigamos una base que nos fortalezca y nos obligue a ponernos como importantes a la hora de nuestra satisfacción”.










martes, 10 de julio de 2007

La Escuela como agente socializador ¿Enseñar para adaptarse a la sociedad o para transformarla?


LA ESCUELA COMO AGENTE SOCIALIZADOR.

¿ENSEÑAR PARA ADAPTARSE A LA SOCIEDAD

O PARA TRANSFORMARLA?

ANÁLISIS DE POSTURAS Y PRESUPUESTOS TEÓRICOS Y METODOLÓGICOS

Silvia Luz de Luca

Maestra titular EGB, Río Negro, Argentina

I INTRODUCCIÓN

Nadie educa a nadie, nadie se educa a sí mismo;

los hombres se educan entre sí,

mediatizados por el mundo, Paulo Freire.

En el texto de Giroux, H y Penna, A, “Los profesores como intelectuales. Hacia una pedagogía crítica del aprendizaje”, se destaca el hecho evidente de que las escuelas son instituciones sociopolíticas, y hace alusión a unas cuestiones que plantea R. Tyler: “¿Deberían las escuelas formar a los jóvenes para que se adapten a la actual sociedad tal como ella es de hecho? O, por el contrario, ¿Tiene la escuela la misión revolucionaria de formar a los jóvenes que tratarán de mejorar esa misma sociedad?[1]

Según una encuesta realizada en una escuela rural (Ubicada en el Alto Valle de Río Negro, Argentina, a seis kilómetros de la ciudad de Allen, con una población de clase baja, hijos de peones rurales, inmigrantes chilenos que tratan de insertarse en la sociedad argentina), sobre qué función cumple la escuela y qué se espera de ella, el 90 por ciento de los padres contestó: educación, disciplina, respeto, preparación adecuada para el secundario (aunque muchos mandan a sus hijos a trabajar a las chacras en lugar de seguir estudiando), continuidad, no paros. A buen entendedor se ve una clara tendencia a la educación tradicional y de adaptación, se asemeja al análisis de educación que realiza Bernstein (citado en el texto de Giroux):

[...] los estudiantes aprenden valores y normas destinados a producir “buenos” trabajadores industriales, interiorizan valores que acentúan el respeto por la autoridad, la puntualidad, la limpieza, la docilidad y la conformidad.

Entonces ¿qué deben hacer los maestros rurales rionegrinos? ¿Qué propuesta pedagógica implementar? ¿Preparar ciudadanos (mano de obra barata) para adaptarse a la sociedad actual, cada vez más consumista e individualista o para transformarla?

Se analizarán opiniones y presupuestos teóricos y metodológicos de algunas tendencias pedagógicas, para llegar a conclusiones que orienten a los docentes y directivos de las escuelas a determinar qué orientaciones educativas brindar a sus alumnos.

II EL MODELO NEOLIBERAL

Los neoliberales definen un conjunto de estrategias orientadas a transferir la educación de la esfera de los derechos sociales a la esfera del mercado. Para ellos, la crisis educacional es, antes que nada, una crisis de eficiencia, eficacia y productividad derivada del inevitable efecto perverso al cual conduce la planificación y el centralismo social. (Gentili y da Silva, 1994). Consideran que las instituciones escolares deben funcionar como pequeñas empresas productoras de servicios educacionales y asumir los principios de probada eficacia para alcanzar cierto liderazgo en cualquier mercado. McDonaldizar la escuela supone pensarla como una institución flexible que debe reaccionar a los estímulos (las señales) que emite un mercado educacional altamente competitivo[2].

En este modelo de organización social, la escuela tiene por función, en la perspectiva de los hombres de negocios, la transmisión de ciertas habilidades y competencias necesarias para que las personas se desempeñen competitivamente en un mercado de trabajo altamente selectivo y cada vez más restringido. La buena educación escolar debe garantizar las funciones de selección, clasificación y jerarquización de los postulantes a los futuros empleos. Para los neoliberales, en esto reside la “función social de la escuela”. (Gentili, 1995).

III ¿INVERSIÓN O BIEN DE CONSUMO?

En su libro “El capital humano”, Sara Finkel plantea esta pregunta y dice que la ideología dominante de los organismos educativos nacionales e internacionales se podría definir como:

[...] la inversión en educación es productiva cuando sólo son aquellas habilidades, conocimientos y atributos adquiridos por el hombre y capaces de aumentar la capacidad de trabajo.

Desde la producción capitalista, la educación tiene relevancia económica sólo y cuando contribuye a aumentar la productividad de los trabajadores productivos. No es el contenido de la educación lo que determina por sí mismo su carácter productivo sino la inserción de éste en la producción. Define así la educación como consumo, si refleja valores tradicionales y la educación como inversión, si responde a una concepción moderna, eficiente y es funcional para el desarrollo.

Este enfoque de la educación, aún con los años, no pierde vigencia en la sociedad actual, ya que a menudo se escucha la pregunta que 2.300 años atrás, un joven estudiante de geometría preguntó a Euclides: “¿Qué es lo que ganaré aprendiendo estas cosas?”. El maestro llamó a su esclavo y le dijo:”Dale unas monedas, pues parece que éste debe ganar algo con lo que aprende”[3].

Por otra parte, Adriana Puigross, señala que los criterios de reclutamiento utilizados por los empleadores no responden a políticas globales ni a acuerdos establecidos entre el sector privado y los organismos gubernamentales destinados a capacitar recursos humanos, ni tampoco a convenios entre empresarios o a los directivos de las empresas estatales. La demanda de capacitación responde a una serie compleja de factores, entre los cuales parece jugar un papel determinado la cultura general, pero a ello se le agregan elementos de personalidad, experiencias y capacidad de adaptación[4].

IV EQUIDAD VERSUS POLÍTICAS SOCIALES

Las sociedades sostienen las escuelas por razones que se encuentran entre dos extremos: por una parte, porque contribuyen a reproducir el orden social; por otra, por la esperanza de que pueden contribuir a mejorar ese orden. Las escuelas caminan orientadas así entre el pasado y el futuro. Su tarea no es sólo preservar el pasado, sino construir el futuro. En la escuela se aprende de los maestros, de los compañeros de clase, de los libros, del ejemplo de los adultos, de la forma en que se organiza y lleva a cabo la tarea escolar, de muchas cosas. Se aprende una relación con el conocimiento y con la realidad a la que ese conocimiento se refiere y sobre la que se le permite actuar. Se aprenden formas de relaciones con otras personas. Se aprenden ideas sobre uno mismo, sobre nuestro lugar en la estructura social, en la vida y en el mundo, se desarrollan esperanzas y expectativas, se adquieren habilidades[5].

El número de personas que vive bajo la línea de pobreza en América Latina aumentó de 136 millones en 1980 a 204 millones en 1997, y no ha disminuido en términos porcentuales. Porque las condiciones de vida de los más pobres son tan limitantes del bienestar, de las capacidades y libertades, todas las personas en Latinoamérica quieren que sus hijos tengan oportunidades que les permitan desarrollar capacidades para que su lugar en la estructura social no sea librado al azar. De este modo todos los padres tienen expectativas de que sus hijos tengan oportunidades educativas que les permitan satisfacer sus necesidades y vivir con bienestar y destinan parte de sus recursos, por modestos que sean, para que sus hijos desarrollen capacidades que les permitan ser libres y vivir bien; todos esperan que las escuelas les ayuden en esta tarea.

La tarea de la política social no es preocuparse de las fuentes de la desigualdad, que se encuentran en la base del sistema y, por lo tanto, más allá de su campo de acción. Este esfuerzo de delimitación de las áreas legítimas de actuación no implica negar la conveniencia de que la política económica sea manejada según objetivos de naturaleza social.

Como derivación de la confusión limítrofe y de los campos de acción de ambas políticas, suelen plantearse alternativas como enseñar a pescar a quienes tienen hambre en lugar de entregar pescado. La propuesta tiene la fascinación de la sabiduría oriental. Pero ¿cuáles son sus implicancias concretas? Se ha repetido muchas veces que la lógica de funcionamiento de las economías latinoamericanas tiende a cerrar el acceso a sectores de la población en el mercado formal de trabajo. Cuando se habla de “enseñar a pescar”, ¿se busca revertir esa tendencia desde la política social? Si es así se trata de una pretensión insostenible. La política social cumple el objetivo de invertir en recursos humanos (que puede interpretarse como enseñar a pescar) pero necesita que el sistema productivo esté en condiciones de demandar ese personal, que haya un “río que tenga peces”, siguiendo la metáfora (Sergio España).

V TODOS PUEDEN APRENDER

Últimamente se presentan dos líneas de pensamiento que confluyen en la vinculación pobreza-riesgo escolar. De un lado, el progresista, se viene escuchando con cierta frecuencia la aplicación del concepto de educabilidad, no ya como condición innata de todo ser humano, sino como resultado de las condiciones sociales previas a la escolarización de cada niño. Hay incluso quienes buscan el indicador que permita identificar el número de niños «por debajo de la línea de educabilidad». Del lado del ultraliberalismo el concepto es el darwinismo, es decir, la presunción de que hay factores sociales y culturales que terminan tornándose en genéticos, al punto de predeterminar el futuro de los niños (¿idea de los padres y maestros rurales?). En definitiva, unos desde el reconocimiento del drama social, otros desde la exaltación de lo orgánico, ambos coinciden en relativizar las posibilidades de éxito de los más pobres.

Por eso resultan tan importantes las contribuciones de las experiencias e investigaciones que analizan las causas del éxito en el rendimiento y escolarización de alumnos de sectores postergados, como la disponibilidad de libros en las aulas, la cercanía de la escuela, el transporte, la adecuación en la propuesta curricular o la educación preescolar, todos ellos muestran fuerte incidencia sobre las posibilidades educativas de los alumnos, a pesar de los difíciles puntos de partida familiares.

Esta síntesis del trabajo sobre Políticas sociales en América Latina, escrito por Sergio España, hace referencia también al plan que se puso en marcha progresivamente en escuelas rurales de nuestro país, a partir de 1996, y que permitió a los alumnos insertarse sin problemas en las escuelas secundarias urbanas.

VI EDUCAR AL SOBERANO

Quienes entienden que la escuela es la única que puede garantizar la educación del pueblo, lo hacen partiendo de la convicción de que la educación escolar posee un potencial transformador y que «La escuela cumpliría la parte que le corresponde en esa trasformación con la eficiencia, para garantizar a las clases populares la adquisición de conocimientos que favorezcan su inserción en la dinámica más general del cambio» (Melo, 1985). Para que esto sea posible es preciso que deje de ser «selectiva e Incompetente» lo cual sólo puede lograrse trabajando «dentro de ella para aumentar significativamente las oportunidades de acceso y los años de permanencia de las clases populares en el sistema de enseñanza».

En la tarea histórica de constituir al pueblo como fuerza real efectiva, la educación popular ocupa un lugar estratégico y ello nos obliga a ser precisos en la definición de sus objetivos y en la identificación de sus destinatarios.

Este texto extraído de: «Poder político y educación popular» de José Tamarit, nos acerca a la idea de escuela transformadora, así como lo expuso Henry Giroux, en la conferencia que dio en el congreso nacional organizado por la Asociación de Diarios de la República Argentina (Córdoba, 2000):

[...] lo que se analiza aquí es la necesidad de educar a los alumnos con el conocimiento y habilidades que necesitarán para participar en el mundo público, para ser actores de un gran escenario y participar en la conversación pública que prevalece acerca de temas educativos, políticos, sociales y culturales. Esto sugiere prácticas educativas que conecten el pensamiento crítico con la acción colectiva, el conocimiento y poder con una impaciencia profunda con respecto al status quo, y a la mediación humana para la responsabilidad social. Las escuelas deben proporcionar a los alumnos posibilidades de pensamiento crítico, de ciudadanía social y una vida democrática vigorosa”.”Los docentes deben poder discutir las formas de pedagogía que cierran la brecha entre la escuela y el mundo real. El currículo debe estar organizado alrededor del conocimiento que se relaciona con las comunidades, las culturas y las tradiciones que dan a los estudiantes un sentido de historia, identidad y lugar.

VII LA TRAGEDIA EDUCATIVA

Por último se considera el texto de Guillermo Jaim Etcheverry: “La Tragedia Educativa”, porque describe la crisis de la educación en nuestro país.

En la sociedad actual cada vez se privilegia más lo útil, lo que sirve para trabajar, frente a lo que se considera ocioso saber perimido. Los medios han ido invadiendo a los niños, y los padres y docentes se enfrentan a una lucha desigual, porque el deseo de vender es mucho más poderoso que los valores familiares. Uno de los objetivos de la cultura popular contemporánea es eliminar las dificultades, simplificarlo todo. ¿Una obra maestra de la literatura o una sinfonía parecen complejas? Hoy esto no es un problema. La maquinaria de la cultura popular contemporánea cuenta con poderosas herramientas que permiten “procesar” las grandes creaciones del hombre para despojarlas de ambigüedades, quitarles los matices y todo vestigio de sutileza. Ante la sola sospecha de dificultad, se ponen en marcha los aceitados mecanismos de la simplificación. Una obra de arte se usa como material para generar fantasías que permiten pasar un rato divertido. Cada día estamos más expuestos a esta cultura pasteurizada, papilla intelectual que prolonga la lactancia de una vida fácil, sin esfuerzos, y de una estúpida jovialidad. La preocupación central de nuestra sociedad es que lo que aprendan los jóvenes les “sirva”, pero en beneficio económico. (modelo neo-neo)

Se necesita recibir señales permanentes de la cultura que perduren más allá del espejismo fugaz de la fama. Para ello, la dirigencia debería abandonar el culto al éxito que dominó en los años ochenta, y que identifica el triunfo y la sabiduría con el dinero y el poder.

VIII CONCLUSIONES

Al considerar diferentes textos y opiniones se pone de manifiesto la polaridad de las intenciones al educar. Si se educa a los alumnos para adaptarse a la sociedad y sólo para el trabajo, como sostienen muchos, se corre el riesgo de preparar graduados obsoletos, ya que, como va la historia, nadie sabe muy bien cuáles serán las categorías laborales del mundo en menos de una década[6]. Por otra parte se pierde el sentido de la cultura, los valores, el esfuerzo, y se hace factible que sus mentes comiencen a trabajar exclusivamente dentro de los límites de los medios mediante los que son educados. Desgraciadamente, el modelo neoliberal y sus variantes, con algunas pequeñas diferencias, es el discurso político actual, cualquiera sea su tendencia partidaria, y la sociedad en general lo sostiene aunque no esté de acuerdo con él.

Si, por el contrario, se cae en el extremo de construir una educación inclinada hacia la intolerancia y la violencia, hacia la interrupción de los procesos, la inestabilidad y la crítica por la crítica misma, se corre el riesgo de formar “inadaptados” y no transformadores de la sociedad.

Si bien, el educar para el trabajo es más una tarea de la educación secundaria, en el medio rural muchas veces la educación básica o primaria es la única a la que se accede. Además los análisis realizados por los grandes organismos de las Naciones Unidas y por los datos aportados por todos los informes de la UNESCO, el gran problema es el tipo de futuro que le espera al mundo rural y la educación que va a ser necesaria para esas poblaciones que, hoy en día, son más de la mitad de la humanidad. Con otro problema grave: ¿Quién tiene la capacidad de diseñar y elaborar esa estrategia?

Entonces, ante el peligro de que la educación se convierta en una forma de ganarse la vida y deje de ser una experiencia que permita el derecho al conocimiento, necesidad básica del ser humano, los docentes junto a los padres deben sentarse a construir una escuela que sirva como espacio de resistencia de la cultura dominante, no se trata sólo de aprender a vivir en sociedad sino a cambiarla cuando sea necesario, no se puede responder a un niño : no pierdas tiempo aprendiendo estas cosas, no son rentables.

Hay que recordar que en la tarea histórica de construir al pueblo como fuerza real efectiva, la educación popular ocupa un lugar estratégico y que ello nos obliga a ser precisos en la definición de sus objetivos, en la identificación de sus destinatarios y sobre todo en la formación de personas libres, capaces de elegir el estilo de vida que llevarán.

Para finalizar se transcriben los conceptos de Jacques Delors que resumen la idea del autor de esta monografía:

Al final de un siglo caracterizado por el ruido y la furia tanto como por los progresos económicos y científicos –por lo demás repartidos desigualmente -, en los albores de un nuevo siglo ante cuya perspectiva la angustia se enfrenta con la esperanza, es imperativo que todos los que estén investidos de alguna responsabilidad presten atención a los objetivos y a los medios de la educación.

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[1] También citado en el mismo texto, el educador Paulo Freire afirma que: “No hay nada parecido a un proceso educativo neutral. La educación, o bien funciona como un instrumento utilizado para facilitar la integración de la generación más joven dentro de la lógica del sistema actual y obtener su conformidad al mismo, o bien se convierte en “la práctica de la libertad”, en virtud de la cual hombres y mujeres se enfrentan crítica y creadoramente con la realidad y descubren la forma de participar en la transformación de su propio mundo”

[2] En el texto se compara a la escuela con los fast food. Dice que tienen un punto en común: ambos existen para dar cuenta de dos necesidades fundamentales en las sociedades modernas: comer y ser socializado escolarmente. La escuela pensada y diseñada como una institución prestadora de servicios, debe asumir los principios de probada eficacia para alcanzar cierto liderazgo en cualquier mercado.

[3] Mencionado en “La Tragedia Educativa” de G. Jaim Etcheverry.

[4] Al hacer referencia a educación-trabajo, la autora plantea que las instituciones educativas no proporcionan una adecuada formación básica, conservan orientaciones laborales vigentes treinta o cuarenta años atrás y utilizan un discurso lineal y rígido incapaz de preparar al estudiante para adaptarse a la variedad de situaciones sociolaborales, científicas y tecnológicas que se le presentan.

[5] Síntesis de un artículo aparecido en la Revista Iberoamericana de Educación número 23, publicación monográfica cuatrimestral editada por la OEI, escrito por Fernando Reimers Arias:”Educación, desigualdad y opciones de política en América Latina en el siglo XXI”.

[6] Del libro de G. Jaim Etcheverry: La tragedia educativa.


Tomado de Por una nueva educación.